22 feb 2013

Dos cascos de gladiadores tracios

Buscando bibliografía para mi trabajo, ayer topé con estas dos preciosidades en el catalogo de la exposición "Sangue e arena" que se pudo ver en Roma entre los años 2001-2002.  Ambos me parecieron espectaculares no solo por su conservación sino también por la belleza artística.

La función del casco de los gladiadores era, evidentemente, de protección evitando los golpes en la cabeza, pero además, y también muy importante, ayudaba a mantener la autoconfianza, así el gladiador se convertía en una maquina de pelear, inhumano que mata, pero que al mismo tiempo, por no ser humano, puede ser matado sin escrúpulos.  

Pongámonos en el lugar de un gladiador, tenemos nuestro casco puesto, para comenzar y es inevitable siempre pasa cuando no podemos rascarnos, comienza picarnos la nariz, hace mucho calor ahí dentro y el sudor nos empieza a caer, también en los ojos a pesar de que el acolchado interior absorbe parte del liquido, lo peor de todo es que no nos podemos limpiar el que nos pica en los ojos.  Pero la situación empeora, cuando comenzamos a movernos nuestro cuerpo necesita oxígeno, así que tenemos la sensación de faltarnos aire.  La visión es casi nula desde detrás del casco a penas se ve nada y la arena está llena de trampillas que pueden provocar un tropezón que daría ventaja a nuestro contrincante, perdiendo entonces la lucha y la vida.  Además tu yelmo tiene una característica específica: la cresta que hace que cuando te atacan tengas que agacharte más y más rápido para evitar el golpe.

En este caso tenemos dos cascos. Ambos de gladiadores tracios o thraex.  Son característicos de este tipo la cresta en forma de grifo.  

El primer casco fue encontrado en Pompeya, se encuentra en la actualidad en el Museo Arqueológico Nacional de Nápoles, ha sido datado en el periodo neroniano-flavio.  




Es característico de este tipo de cascos en esta época la  la curvatura hacia abajo de la visera y la abertura de celosía, que ocupa toda la parte superior de la visera.  Este tipo de casco es el llamado de thraeces, se caracteriza por el lophos que culmina en un grifo prótomo de los gladiadores murmillones o oplomache, en la que aparece la cresta suave.  Ademas estaban decorados con plumas y crin de caballo que se insertaban en las muescas en los lados de la tapa de la cresta.

Este yelmo es atribuible a un thraex, presenta en la parte superior una decoración marina, en la parte frontal  esta una ninfa franqueada por dos delfines y dos conchas de caracol marino.  En el ala tiene incisas las iniciales "MCP"

Este otro casco también fue encontrado en Pompeya y también puede verse en el Museo Arqueológico Nacional de Nápoles.  





Se trata de un yelmo de cúpula semiesférica, con un ala ancha y recta y un visor que cubre toda la cara dejando solo dos aperturas circulares enrejadas para la visión, estas características nos ayudan a datar el yelmo en el periodo julio-claudio. En la parte delantera, que simula una corona aparece una palma, esta estaba destinada al vencedor de los combates. La visera está decorada con dos escudos redondos (parmae), bajo cada uno de los cuales aparecen  representadas dos lanzas entrecruzadas. En la parte inferior de los orificios enrejados para los ojos hay dos cierres y sobre estos unas bisagras para poder abrir y cerrar esta parte de la visera. El cimero, curvado hacia delante termina en un grifo.

El gladiador tracio completaba su armamento con un pequeño escudo rectangular (parmula) y una espada pequeña de filo curvado (sica), grebas (a modo de espinillera pero que cubría desde la parte superior de la rodilla hasta la parte superior del pie, una protección para el brazo, hombro y espalda y un cinturón protector.  


20 feb 2013

PRIMERAS JORNADAS PREDOCTORALES DE ARQUEOLOGÍA, HISTORIA ANTIGUA Y FILOLOGÍA CLÁSICA



Me han pedido desde Alicante que os comunique que el 

Colegio Oficial de Doctores y Licenciados en Filosofía y Letras y en Ciencias de Alicante 

nos propone para las fechas 

29, 30 y 31 de mayo de 2013 

las 

PRIMERAS JORNADAS PREDOCTORALES DE ARQUEOLOGÍA, HISTORIA ANTIGUA Y FILOLOGÍA CLÁSICA 

con el tema 

CRISIS, GUERRA Y RELIGIÓN EN EL MUNDO ANTIGUO. UNA PERSPECTIVA MULTIDISCIPLINAR.



Tienen muy buena pinta y el plazo de envío de propuestas expira el día 27 de marzo a las 24:00 horas.


Puedes asistir como oyente o participante, en esta segunda modalidad para estar en una mesa redonda, con una exposición o con un poster.

Para más información y petición del call of paper podéis escribir a jornadascdlalicante@gmail.com o también podéis visitar el evento en facebook pinchando aquí.

18 feb 2013

Algunas notas sobre el parto en la antigua Roma.


Estoy leyendo ahora mismo el libro de J.L. Arsuaga "El primer viaje de Nuestra vida" (Ed. Temas de hoy).  Como siempre me parece fascinante lo que escribe y he hecho un descanso de la lectura cuando he llegado a la pagina 137 donde habla de varias piezas romanas donde aparecen escenas de nacimientos de niños.  Enseguida he acudido a google para buscar dichas imágenes y me resultan tan curiosas que he pensado que podría ser interesante colgarlas en el blog con algunas notas del libro de Arsuaga ampliadas con pesquisas varias por la red y otros libros.  

En primer lugar habla de una terracota encontrada en la tumba de Isola Sacra (Ostia):



Y también habla de este marfil de Pompeya  (en el Museo Nacional de Nápoles):


Buscando las piezas anteriores he encontrado otras relacionadas como este mármol de Ostia Antica:


Esta otra que no he encontrado donde se puede visitar ni su cronología, pero obviamente es romano:


Tampoco he encontrado la cronología de este y el lugar donde se ha encontrado, pero es también romano:


Otra imagen de un parto, del siglo IV dC


Un fragmento de mármol con un (posible) parto, del siglo I-IV dC


En la Antigua Roma el trabajo de traer niños al mundo lo llevaban a cabo las parteras.  Los médicos excepcionalmente acudían a los alumbramientos, pero solo cuando la vida del bebé o de la madre corrían peligro y siempre y cuando las parteras les llamasen.

Fue Sorano de Éfeso, médico del siglo II dC que ejerció en Alejandría y Roma quien escribió el primer tratado de ginecología ("Libro de las enfermedades de las mujeres" - Gynaikeia) en cuatro tomos y que fue traducido al latín por Muscio en el siglo VIdC.  En la tercera parte de su libro, Sorano habla sobre el parto y cómo debe ser atendida la madre y el recién nacido durante el alumbramiento.

Nos cuenta en su tratado que el principal instrumento de las comadronas era la silla de parir, con respaldo, brazos y un asiento con un entrante en forma de media luna, por donde pasaba el niño.  Entre el asiento  y el suelo había tableros a los dos lados, pero no delante ni detrás, para que la comadrona se manejara.  La parturienta se sentaba en la silla que había traído la comadrona al comienzo de la fase de "expulsión", la dilatación se hacía en cama.  Si la familia era muy pobre se utilizaba un "asiento humano" hecho por una persona fuerte, en cuyo regazo se acomoda a la parturienta. 

La comadrona (en latín commater) era asistida en su labor por tres personas, dos a los lados y una por detrás de la silla.  Además también existían ginecólogas (feminae medicae) pero estas solo se dedicaban a la medicina de enfermedades propias de las mujeres.

Las cesáreas solo se realizaban una vez la madre había muerto.  Era una operación peligrosa y la embarazada corría peligro de muerte si se realizaba en vida por las infecciones y por probable muerte por  desangrarse.  Es una leyenda urbana dice que la palabra "cesarea" vendría de Julio Cesar, pero sabemos que su madre Aurelia vivió muchos años tras el nacimiento de su hijo, así que esta no fue la forma en que llegó al mundo el famoso personaje.  Plinio el Viejo cree que el cognomen Caesar vendría de un antepasado que si nacería de esta manera.  La Lex Caesarea decía que una mujer que muriese durante el embarazo tardío debía ser sometida a esta intervención con la finalidad de salvar la vida del feto.  En realidad la primera cesárea de la que tenemos constancia de supervivencia fue de una mujer en Alemania en el año 1500.

12 feb 2013

Nuevo patrocinador: Angel Kuenka

Arqueología en mi Jardin celebra haber encontrado un nuevo patrocinador, esta vez para el regalito que haremos para las 100.000 visitas.  Las normas del concurso-rifa las podéis ver aquí.  ¡¡Animaos a participar!!



Angel Kuenka además de ser un gran y buen amigo es un pedazo de artista.  Hace unas reproducciones sobre temas egipcios que son alucinantes.   Podéis ver sus trabajos en su blog pinchando aquí y también tiene una página en facebook donde va colgando fotos y detalles de su obra donde puedes pinchar en "me gusta" para estar al día aquí.  



Si estáis buscando un regalo, cualquiera de sus obras, dejará al homenajeado con la boca abierta.  Son tan bellas que parecen hechas por los mismos egipcios y desenterradas por arqueólogos.  No dejéis de visitar su blog.


Estoy deseando ver lo que ha preparado para que Arqueología en mi Jardín os regalemos en el sorteo.  Participad y suerte a todos.

10 feb 2013

Libro: "Breve historia de... Cleopatra"


"Breve historia de... Cleopatra"  me ha decepcionado y es que no siempre te pueden gustar todos los libros que lees.  Pero vayamos por partes.

Miguel Ángel Novillo López escribe con una literatura rápida de leer (el libro lo he leído en tan solo unas horas) pero peca de ser especialista en Roma (otros de sus libros son "Breve historia de Julio César", "Breve historia de Roma" o César y "Pompeyo en Hispania") y eso se nota a lo largo de todo este libro en el que obviamente olvida que Cleopatra es la protagonista y el tema principal de su relato y parece que el título más bien debería ser "Como Roma se hace con Egipto" puesto que, a excepción de un par de capítulos el resto del libro habla de Julio Cesar, de Marco Antonio y de Roma intentando hacerse con el poder de Oriente a través de Egipto y la pobre Cleopatra queda en un segundo término.

No dudo de la importancia para la biografía de Cleopatra de la influencia de Roma, pero el autor, queriendo escapar, como él mismo dice  de los tópicos vuelve a caer en el tópico Cleopatra-Cesar, Cleopatra-Marco Antonio y es una pena.  Se que se trata de una "breve historia" pero el tema principal es Cleopatra y se echa de menos la versión egipcia e incluso griega de la reina a pesar de que el autor sí que hace mención a la existencia de textos al respecto.

Cleopatra era reina de Egipto, pero Egipto no aparece por ninguna parte en el libro y parece a lo largo del libro que Cleopatra era solo y únicamente reina de Alejandría.  No se nombra a su pueblo (al que debía amar tanto para sacrificar tanto por él), no se nombran sus construcciones (que fueron numerosas como buena reina egipcia), no se nombra su relación con los sacerdotes, ni sus esculturas....  Para ser Cleopatra la reina de Egipto se olvida su reino y su reinado por completo.

Si algo tiene a su favor es la forma en que trata la figura de la reina, defendiendo su honorabilidad y dejando atrás la visión misógina que de ella hemos tenido a lo largo de la historia debido a que los textos tradicionalmente tratados por los investigadores han sido escritos por romanos y su forma de ver a la mujer difería completo del papel real que la mujer tenía en Egipto.

Si tuviese que recomendar el libro solo diría una cosa: si quieres leer sobre Julio Cesar, Marco Antonio y Octavio y de su trato a Cleopatra de forma breve y directa este es tu libro.  Si esperas conocer a la famosa reina de Egipto olvídate, aquí no lo vas a encontrar.

Por último quisiera añadir un error garrafal en la pag. 45 dice "En esta ocasión, y como a las otras setenta ciudades que fundó con anterioridad...", la Alejandría de Egipto fue la primera fundada por Alejandro, no fue la 71, puesto que antes de comenzar sus andanzas por Oriente visitó el oasis de Siwa, en el desierto de Libia, donde le famoso oráculo le confirmó que iba a ser un ser divino y el legítimo faraón de Egipto, tras lo cual comenzó su campaña en Oriente donde fue fundando las siguientes ciudades.

Terminar con una frase de Horacio que menciona el propio autor ""El Egipto conquistado conquistó Roma".


"BREVE HISTORIA DE CLEOPATRA" 

Miguel  Angel Novillo López
Nowtilus, 2013
Nº de páginas: 208 págs.
ISBN: 9788499674384

También en versión Kindle
Tamaño del archivo: 2208 KB
Longitud de impresión: 208
Editor: Ediciones Nowtilus; Edición: 1 (10 de enero de 2013)
Vendido por: Amazon Media EU S.à r.l.
ASIN: B00AZHTG0I

9 feb 2013

Libro "La gente de la ciénaga"


Este libro ha sido uno de los regalos que Papá Noel me dejó estas navidades.  Fue toda una sorpresa porque no conocía su existencia y ha sido una delicia leerlo.

P.V. Glob fue un arqueólogo danés que trabajó como Director General de Museos y Antigüedades del Estado de Dinamarca y como director del Museo Nacional de Copenhague.  Fue sobre todo conocido por sus investigaciones sobre los cuerpos de las turberas, estudiando el hombre de Tollund y el de Grauballe.  Ambos restos momificados están datados en la Edad del Hierro y de la Edad del Bronce y se encontraron dentro de las turberas danesas conservándose en perfecto estado.

El caso de las turberas es muy curioso e importante.  En estos lugares se han llegado a encontrar cuerpos humanos y objetos variados de distintos materiales, la mayoría de ellos de la Edad del Hierro, pero no se trata de hallazgos exclusivos de la antigüedad, hay restos incluso de la Segunda Guerra Mundial.  En el caso de los más antiguos son, en su mayoría, de personas que sufrieron muertes violentas, quizás ejecutados como criminales o como sacrificios, y que después de su muerte eran depositados en la ciénaga.  

No se trata de un hecho aislado de Dinamarca, este tipo de yacimientos se encuentran en muchos otros lugares al norte de Europa incluidas las Islas Británicas.



La conservación de estos cuerpos es debido a el entorno anaeróbico.  Las turberas son "microsistemas" sin aire, a lo que se suman sustancias químicas, lo que provoca que no aparezcan microbios y por lo tanto la materia orgánica no se descompone.  Como las sustancias químicas son ácidos lo único que desaparece es el hueso, pero piel, pelo, órganos internos y sustancias vegetales se conservan perfectamente llegando hasta nosotros los cuerpos con ese aspecto como de cuero curtido.   

Lo más destacable, además de los cuerpos, es la posibilidad de poder investigar las ropas de la época, muchas de ellas representadas por artistas romanos en relieves, pero que mediante estos descubrimientos se han podido estudiar de primera mano.  Y el análisis de los estómagos para conocer cual fue la última ingesta de los personajes ejecutados.

Este libro de Glob me ha encantado.  El libro en realidad el objetivo del autor no era escribir un libro sino que se trataba de una carta que Glob escribe a unas niñas inglesas de un colegio, que le piden información llenas de curiosidad en 1962 a raíz del descubrimiento del hombre de Tollund.  Glob responde gustoso a la carta de las colegialas con este libro, que comienza siendo una carta para pasar a ser una "larga carta" y que dedica a su hija junto a todas las niñas firmantes de la carta (todos sus nombres aparecen en la dedicatoria).  Esta carta-libro fue terminado de escribir el 13 de agosto de 1964.

En el libro (es una increíble siempre leer estas cosas escritas por la mano del mismísimo arqueólogo que realizó los descubrirmientos) se habla del hombre de Tollund, del hombre de Graubelle, de otros descubrimientos humanos dentro de las turberas de Dinamarca así como de otros descubrimientos similares en turberas en otros países.  Termina el libro con dos interesantísimos capítulos, uno sobre como vivían estos daneses de la Edad del Hierro y el porque, según el parecer del autor, ocurrían este tipo de enterramientos.





Un libro muy recomendable, de fácil lectura, de divulgación sin dejar el nivel erudito y académico de una persona de su talla.  Con él he aprendido algo más de aquellas personas cuyas fotos pululan en los manuales de arqueología en el capítulo de conservación junto con las imágenes de las momias egipcias.

Y es que lo tengo que confesar, me encanta leer este tipo de literatura en que los grandes arqueólogos de la historia escriben sus descubrimientos, la pasión con que hablan de sus investigaciones, las descripciones de los lugres de donde extraen sus secretos, y los capítulos con sus conclusiones, son increíbles y parece que vivas junto a ellos sus investigaciones.  

Ojo, cuando uno coge estos libros hay que tener en cuenta que se trata de clásicos y como tales hay que leerlos ya que con el paso del tiempo y el avance de la ciencia muchas de sus teorías han quedado desfasadas, pero no deja de ser un tesoro poder leerlos y poder estar tan cerca de ellos gracias a sus palabras.


Nº de páginas: 230 págs.
Encuadernación: Tapa blanda
Editoral: MARBOT
Lengua: ESPAÑOL
ISBN: 9788492728350


8 feb 2013

La biblioteca de un amante de la arqueología

1- La bitácora de Jenri (periodista especializado):

EL ARQUEÓLOGO ENAMORADO
Editorial: La Esfera de los Libros Autor:Daniel Casado Rigalt
ISBN: 9788497348379
Publicación: 2008
Un viaje único a nuestro pasado remoto y enterrado, tal como Ceram hiciera con la arqueología universal en "Dioses, tumbas y sabios" (una obra maestra, por cierto) hace más de cincuenta años. En sus páginas vivimos en primera persona los descubrimientos de Atapuerca, la Dama de Elche, Ampurias o el teatro romano de Mérida, entre otras historias sorprendentes. Muy recomendable.


2- Ana Santomé (estudiante de Grado de Geografía e Historia):

Puede parecer un topicazo pero Arqueología. Teorías, métodos y práctica de Bahn y Renfrew es para mí un libro imprescindible. Fue mi primer contacto con la Arqueología y, aunque después han venido más libros, al final siempre recurro a él. Creo que tiene un gran contenido, es ameno y cuenta con un gran número de ejemplos muy interesantes.



3- H. Fernando (enfermero en salud mental y aficionado a la historia)

No sé si será imprescindible en la biblioteca de un arqueólogo, pero yo me enamoré de la arqueología con un libro que leí con 13 años, el mítico "Dioses, tumbas y sabios" de C. W. Ceram (Ed. Destino, 480 págs., ISBN: 9788423340798). Es importante para mí porque me descubrió un mundo que desconocía, y coincidió con mi primera participación en una excavación, invitado por un arqueólogo que excavaba un yacimiento Querandí en la provincia de Buenos Aires. Y hacer soñar a alguien y descubrirle todo un mundo es algo que ennoblece a un libro.



4. José Hervás (Encargado de empresa y asesor numismático)
Experto Numismático Profesional. Es un libro imprescindible para la datación de la moneda Hispano romana.



5.  Laura Cb(no arqueóloga pero enamorada de Egipto)

Libro: Los tesoros de Luxor y el Valle de los Reyes. Autor Weeks, Kent R.

Creo que Los tesoros de Luxor y el valle de los reyes, no debe faltar en la biblioteca de ningún egiptólog@, arqueólog@ o egiptoloc@(como yo)ya que gracias a este libro podemos tener siempre a mano muchos de los lugares arqueólogicos que hay por todo Kemet, con muy buenas explicaciones y fotos para no perderte ningún detalle. En mi primer viaje no fue conmigo porque desconocía su existencia, pero a partir de ahora me acompañará en mis próximos regresos.



6- 
Aroa Velasco (doctorando en egiptología)

INTRODUCCIÓN A LA ARQUEOOGÍA de Paul Bahn 
Editorial: Acentro Editorial 
Año de publicación: 1998 

Es una intensa introducción a la arqueología, no sólo desde los puntos teórico y práctico, sino también desde una óptica más humana, en sus (sólo) 89 páginas. Es importante para mi, porque me acompañó durante el primer año de carrera en el tren (donde lo leía) y porque abre los ojos del primerizo y novato en la propia introducción: ser Indiana Jones no es ser arqueólogo y no esperes ni ser famoso ni hacerte rico. 






7- 
Diana Navarro. No soy arqueóloga. (futura estudiante de historia, y si todo sale bien, futura egiptóloga)

Un libro imprescindible podría ser el "Diccionario de Arqueología Egipcia" de M. Brodrick & A.A Morton.  ISBN: 84-9764-442-5 Editorial: Enigmas de la historia.

En mi opinión, este libro es primordial como libro de consulta para tenerlo siempre a mano, es muy completo en definiciones que, además,llevan adjuntada su imagen correspondiente. Imprescindible para poder resolver cualquier duda repentina.

8- Aránzazu Vaquero, doctoranda en Arqueología.

Mi libro elegido sin duda alguna es “La tumba de Tutankhamón” de Howard Carter, editorial Orbis, Biblioteca de Historia 9, 1985. ISBN: 8475309534

Una buena amiga me lo regaló (esta misma edición) siendo yo una adolescente y empezando ya el gusanillo de la arqueología a hacer mella en mi espíritu. Desde siempre me fascinó Egipto y creo que el hallazgo de la tumba de Tutankhamón no ha tenido precedente alguno. Cualquier arqueólogo que se precie daría lo que fuese por haber estado en el lugar de Carter y haber vivido esa maravillosa experiencia. Este libro te permite ser Howard Carter, viajar en una máquina del tiempo y experimentar en primera persona todas las sensaciones de ese hallazgo excepcional. 




9- 
Sergio Ισπανία (doctorando en arqueología)

Aunque ya ha cumplido 10 años, este libro es importante para mí porque fuera de lo que es la arqueología tradicional, me descubrió al principio de empezar la carrera, que se podía pensar de otro modo en arqueología y que los materiales arqueológicos podían ser entendidos más allá de patrones económicos o sistemas sociales, revelándonos una manera más íntima a los pensamientos y sentimientos identitarios de las sociedades del pasado.




Libro: Arqueología de la Identidad
Autora: Almudena Hernando Gonzálo
Edición: Akal, Madrid, 2002



10 - MG Carvajal (Licenciada en Historia. Auxiliar de biblioteca) 

Los libros que habéis dicho son muy buenos, yo voy a votar por uno que pertenece a una serie titulada "Grandes Civilizaciones de la Antigüedad" y este en concreto se centra en el "Oriente Próximo". Ofrece una buena introducción de la civilización Mesopotámica, hablando de sus etapas históricas y producción artística. Mucha información y un buen catálogo de imágenes. Tengo muy buen recuerdo de él cuando lo usaba como complemento de estudio en los inicios de la carrera. Grandes Civilizaciones de la Antigüedad: Oriente Próximo. Autor: Rafael Domínguez Casas. Editorial: G.R.U.P.O.,S.A. ISBN: 84-7906-336-X Publicación: 1998 



¡¡Nueva actividad con sorteo!!

En Arqueología en mi jardín proponemos una nueva actividad:





Normas:

1- Dime que libro es imprescindible para ti en la biblioteca de un arqueólogo.

2- Tendrás que enviar foto o enlace de la portada del libro, los datos del libro y un par de frases diciendo porque es importante para ti.

3- Podrán participar todas las personas amantes de la arqueología.

4- Pero habrá dos secciones:

         Una primera sección para arqueólogos y estudiantes de arqueología o historia (deberás acreditar que entras dentro de este grupo de alguna forma)

          Una segunda sección para aquellas personas amantes del tema pero sin titulación, pero con los conocimientos suficientes sobre el tema (las aportaciones de esta sección serán evaluadas antes de ser publicadas)

5- El límite de presentación de tu aportación será el 28 de febrero de 2013 - prorrogado hasta el 20 de marzo.

6- Deberás indicar tu profesión en la entrada o bien simplemente: soy arqueólogo, soy estudiante de historia o no soy arqueólogo.

7- Quien no se ajuste a las normas será excluido.

8- Todas las personas seleccionadas para publicar su aportación participarán en el sorteo de un detallito aun por determinar. - Ya está determinado.  Va a ser una obrita de arte de Angel Kuenka.

9- Las aportaciones será en este blog como comentarios.

10- Las aportaciones se irán colgando en la entrada siguiente (aquí) y se numerarán para poder luego hacer el sorteo con un chisme de esos que generan un número aleatorio que rondan por internet.

¿¿Te apuntas??

7 feb 2013

El caldero Gundestrup, un par de detalles preciosos






El llamado Gran Caldero Gundertrup fue encontrado en la pequeña turbera en forma de olla de Raevemosen en Gundestrup (norte de Dinamarca) en 1891.  Fue depositado en dicho lugar totalmente destrozado durante la Edad del Hierro, probablemente como ofrenda religiosa, al igual que tantísimos otros hallazgos de la misma época encontrados en distintas turberas  de la zona.  La decoración tiene una fuerte influencia céltica, es probable que formase parte del botín en alguna de las campañas de los cimbrios por Europa.  Ciertamente se trata de una pieza única tanto en decoración como en valor debido a la cantidad de plata que utiliza.

Está realizado con 13 láminas de plata dorada decoradas que cubren el fondo de un tazón, cada placa lleva decoración en bajo relieve.  En la parte exterior se ven dioses y diosas en una procesión ritual  escenas de sacrificios, luchas de toros.  Debido a el paralelismo entre deidades, es muy probable que las gentes de la Edad del Hierro de la zona reconociese los rasgos de sus dioses locales o incluso puede que se apropiaran de alguno de ellos.  Piezas de madera del mismo periodo llevan decoración similar aunque mucho menos refinada. 

Destaco aquí varias de las escenas que considero de una increíble belleza.

En una de las placas exteriores aparece la diosa del amor, en su mano derecha lleva un pájaro, símbolo de la diosa, a su alrededor hay dos pájaros más.  A la izquierda una sirvienta la peina y otra mujer aparece sentada junto a su codo derecho.  Por encima se ve un perro que se ha identificado con la diosa de la muerte.  La muerte también aparece reflejada en las figuras que aparecen debajo del pecho, una persona y un perro, ambos posiblemente muertos.  



Otra placa, esta vez del interior, podría representar un sacrificio humano.  Unos guerreros van a en procesión a ambos lados de un árbol de la vida, que nace del caldero en el que se vierte la sangre de las víctimas.  Debajo hay guerreros de a pie, interpretados como prisioneros de guerra que van a ser sacrificados, en la fila superior los guerreros van a caballo, quizás son las mismas víctimas del sacrificio ensalzadas aquí gloriosamente.  El perro, de nuevo la muerte, recibe a los condenados, los jinetes son guiados por la serpiente.  


Dice Estrabón en su "Geografía" sobre los sacrificios de prisioneros en Germania: "Entre las mujeres que les acompañaban en sus campañas de guerra había adivinas que eran a la vez sacerdotisas, grises por la edad, con vestiduras blancas, cubiertas con capas de finísimo lino y un ceñidor de metal, pero sin zapatos.  Esas mujeres entraban en el campamento, iban hacia los prisioneros con una espada en la mano, los ceñían con guirnaldas y los llevaban hasta un caldero de bronce en el que cabían 20 medidas.  Una de ellas se subía a un pedestal e inclinada sobre el caldero cortaba el cuello al prisionero  que era entonces alzado por encima del borde del caldero.  Otra le abría el cuerpo, examinaba sus entrañas y pronosticaba la victoria de los suyos."

Triste noticia: "Zarpazo a la investigación arqueológica"

Esta entrada no es mía, está copiada de un artículo de El País, pero me ha impactado tanto que creía necesario publicarla en el blog.


Zarpazo a la investigación arqueológica

Hacienda suprime las ayudas que Cultura concedió en 2012 a las universidades

Las autonomías respectivas incumplieron los objetivos de contención del déficit



La apisonadora de Hacienda no repara ni siquiera en los restos. Aunque los restos expliquen claves del origen de la humanidad de hace 1,5 millones de años, de la pesca en Pompeya antes de su petrificación en lava en el año 79, o de la civilización maya en Guatemala. El Ministerio de Hacienda ha denegado las subvenciones que la Secretaría de Estado de Cultura había concedido a 30 grupos de universidades españolas con proyectos de arqueología internacional con el argumento de que pertenecen a comunidades autónomas que incumplen sus objetivos de contención de déficit público.
El resultado es que Hacienda propina un bofetón a las comunidades, pero resuena con fuerza en la cara de los arqueólogos en primer lugar. Y, de rebote, en eso tan difuso y tan vital que se conoce como la marca España. “Dice muy poco de la seriedad de un país y repercute muy negativamente en el prestigio de nuestra ciencia, que con mucho esfuerzo había conseguido equipararse con la de países de nuestro entorno”, lamenta Joan Sanmartí, que lidera un equipo de la Universidad de Barcelona dedicado a la investigación arqueológica en el yacimiento de Althiburos, en Túnez.
En los últimos años, la arqueología española había disputado algunos apetitosos espacios a las grandes potencias (Alemania, Gran Bretaña, Estados Unidos o Francia). Su buen hacer explica que yacimientos golosos, como los de la garganta de Olduvai (Tanzania), donde la humanidad ha dejado un acta notarial de su evolución en sucesivos sedimentos, esté en manos de investigadores españoles. Pero el prestigio puede ser lento cuando se invierte en él y efímero cuando se gasta.
“Que se nos haya privado de la subvención (10.000 euros) conlleva que la campaña se lleve a cabo bajo mínimos y pone en peligro la continuidad del proyecto”, lamenta Rafael Hidalgo, que dirige el equipo de la Universidad Pablo de Olavide (Sevilla) que excava en Villa Adriana (Italia), Patrimonio de la Humanidad. Uno de los hitos del patrimonio romano y que, pese a acoger exploraciones desde el siglo XVI, nunca hasta ahora se había abierto al trabajo de los equipos españoles.
En la convocatoria de 2012, Cultura, tras evaluar las 64 solicitudes, había aprobado subvenciones a 45 proyectos, impulsados por universidades, instituciones sin ánimo de lucro y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que se repartían un total de 730.000 euros y que fueron informados de la concesión provisional.
Pero desde el pasado 27 de abril la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera concede la potestad a Hacienda de bloquear subvenciones dirigidas a comunidades que no hacen sus deberes presupuestarios. Solo 10 proyectos presentados desde instancias estatales (CSIC y Universidad Nacional de Educación a Distancia, UNED) y cinco de organismos sin ánimo de lucro recibieron la bendición de Hacienda, que tumbó los 30 que promueven las universidades, (y que suman un total 494.500 euros).
Un portavoz de Hacienda explicó esta semana a EL PAÍS que se valora caso por caso antes de informar negativamente sobre el pago de una subvención destinada a una comunidad autónoma: “Se hace con criterios de racionalidad, no hay un rasero único”, añadió.
No respondió, sin embargo, a la pregunta de cuál fue el criterio utilizado para denegar estas 30 ayudas públicas en arqueología. “Esto no implica que se puedan aprobar este año [2013], pero el dinero del año pasado es ya prácticamente imposible”, aclaró. Lo cierto es que han perdido un dinero con el que contaban y que podrían no haber perdido. Es más, la Secretaría de Estado de Cultura trata de revertir lo que parece irreversible. “El ministerio comprende y comparte la preocupación de las universidades”, señaló ayer una portavoz del departamento de Cultura. Y añadió: “Estamos trabajando conjuntamente con el Ministerio de Hacienda en las vías posibles para solucionar esta situación”.
La realidad es que la pérdida de fondos estatales para continuar excavaciones en el exterior amenaza la pervivencia de algunos proyectos de gran relevancia, como el que dirige en Líbano la catedrática de Prehistoria de la Universidad Pompeu i Fabra, María Eugenia Aubet. Desde 1997 trabaja en la necrópolis fenicia de Tiro-Al Bass, donde han descubierto 400 sepulturas de los siglos IX-VII a. C. “Por primera vez en 2013 habíamos conseguido permiso del Ministerio libanés de Cultura para excavar en la ciudad misma de Tiro, con fuertes presiones por parte de franceses y alemanes para hacerse con esa excavación. Tanto la Embajada española en Beirut como el Ministerio de Cultura libanés apostaron al final por nosotros. De momento no sé cómo afrontar la realidad y pedir disculpas a las autoridades libanesas”, explica.
Este diario contactó mediante correo electrónico con los responsables de los 30 grupos afectados. Respondieron 24 con similar tono de estupor —jamás les habían anulado una subvención concedida— y pesar por la incertidumbre futura. “Hay compromisos adquiridos que no podremos realizar y, por tanto, pasamos a ser una universidad poco seria y fiable con respecto a los proyectos que planteamos con otros grupos de investigación. Es posible que tanto la UCL como el Museo de Addis decida que no interesa nuestra colaboración”, se queja Rafael Mora, de la Universidad Autónoma de Barcelona, que dirige un proyecto sobre las sociedades recolectoras en el valle del Rift, en Etiopía. Cultura les había concedido inicialmente 15.000 euros. “Ninguno de los trabajos previstos se podrá llevar a cabo”, añade.
El equipo de Manuel Domínguez-Rodrigo, profesor de la Universidad Complutense, excava en un lugar icónico y fetiche: la garganta de Olduvai, en Tanzania. Un lugar disputado. A esa carrera arqueológica España se incorporó tarde y, si los ajustes presupuestarios se repiten, saldrá pronto. “Nuestro equipo tiene el control de los yacimientos arqueológicos más importantes de África sobre evolución humana. En caso de no poder ir en 2013 nos expondríamos a que yacimientos tan codiciados fuesen a parar a otras manos”, plantea el profesor, que dirige la excavación con el apoyo de la Universidad de Alcalá. Para asegurarse la continuidad, el equipo intervino sobre el terreno en cuanto tuvo constancia de la autorización provisional de 32.000 euros. “Como nuestra institución y la comunidad cumplían con las condiciones de déficit, nos fuimos con dinero adelantado por la Universidad de Alcalá a realizar nuestra campaña el verano pasado”.
Sin embargo, Hacienda no ha aplicado datos del déficit público de las comunidades de 2012 (aún no cerrados), con los que casi todas las autonomías habrían pasado el examen (con alguna excepción, como Cataluña), sino los correspondientes a 2011, cuando prácticamente todas suspendían.
“Es una decisión que penaliza a la investigación en las universidades con la coartada del déficit de las comunidades autónomas, olvidando el principio constitucional de autonomía universitaria", se queja Pedro Castro-Martínez, profesor de la Universidad Autónoma de Barcelona. Su proyecto, en marcha desde 2005, se centra en las comunidades de la zona de la sierra de La Puntilla, en las inmediaciones de la famosa ciudad de Nasca, en Perú, donde están los geogligos conocidos como líneas de Nasca. Allí trabajan también equipos estadounidenses, japoneses, alemanes, italianos y franceses, casi siempre mejor dotados de medios. “Dada la complejidad de organizar una campaña de excavaciones arqueológicas en Perú, ya se había puesto en marcha el plan de trabajo y teníamos ya planificada la campaña desde noviembre”, explica el arqueólogo. “Hemos tenido que suspenderla y hemos quedado francamente mal. Además, la discontinuidad del proyecto ofrece una muy negativa imagen de la seriedad de los proyectos arqueológicos y científicos españoles”, añade.
Además de la faceta puramente científica, la cancelación de la subvención de 20.000 euros ha dado al traste con un proyecto para contribuir al desarrollo de esa zona deprimida de Perú, a partir de una iniciativa de turismo cultural.
Irónico resulta que el proyecto La Blanca, que dirige la profesora de la Universidad de Valencia, Cristina Vidal, en Guatemala reciba el premio Best Practices in Site Preservation, que concede el prestigioso Archaeological Institute of America (Boston) y el Gobierno español le niegue 32.000 euros porque su comunidad se salta el tope de déficit. “La paralización de fondos es un hachazo a un proyecto que aparte de la investigación en arqueología maya y la puesta en valor de su rico patrimonio cultural, también lleva a cabo acciones de cooperación al desarrollo en las aldeas del entorno de La Blanca”, cuenta Vidal.
Las excavaciones, además, suelen tener padre y madre. Junto al equipo español pueden ir de la mano otras instituciones del país como ocurre con el proyecto de la necrópolis de Qubbet el-Hawa, en Asuán (Egipto), donde el equipo de Alejandro Jiménez se realiza con el Consejo de Antigüedades de Egipto. Dar explicaciones a la contraparte del descuelgue de un año no debe ser fácil ni inocuo, como podría ocurrirle a los equipos españoles que trabajan en Italia con universidades regionales, como el dedicado a explorar la pesca en Pompeya y Herculano desde 2008. “Desgraciadamente habían sido ya ejecutados gastos, pensando como en años anteriores que la resolución sería firme en breve, y que ahora tenemos que asumir por otras vías en una situación económica tan compleja como la que nos atenaza a todos los investigadores a nivel nacional”, expone Darío Bernal, director del proyecto que pilotan las universidades de Cádiz y Ca’Foscari de Venecia.
Desde 1999, cada año, Cultura ha convocado ayudas para proyectos arqueológicos en el exterior a través del Instituto de Patrimonio Cultural de España. La cuantía total ha ido variando, desde los 204.400 euros los cinco primeros años, hasta alcanzar el máximo de un millón de euros en 2011. A partir de entonces comenzó el desplome. El año pasado fueron 730 millones y para 2013 están presupuestados 430.000 euros que, es de suponer, se canalizarán solo a los grupos que trabajen en autonomías cumplidoras con los requisitos del ministro Cristóbal Montoro.
En una carta enviada en diciembre al director general de Bellas Artes y Bienes Culturales, Jesús Prieto, el catedrático de Arqueología, Juan M. Campos, director del proyecto Tamuda en Tetuán (Marruecos), exponía con claridad la gravedad de una decisión como la tomada por Hacienda: “Conoce sobradamente el programa de Proyectos Arqueológicos en el Exterior aporta a nuestra nación una alta visibilidad en el exterior, fomentando las relaciones bilaterales con los países beneficiarios de los proyectos que en algunos casos se trata de estados en vías de desarrollo, con el consiguiente beneficio que conlleva en el desarrollo local (...) De otro lado es preciso hacer alusión al alto rendimiento científico que estos proyectos tienen en el ámbito internacional con el consiguiente prestigio que ello aporta a nuestra nación. Un parón del programa, aunque sea provisional, resultaría tremendamente pernicioso pues a veces a las relaciones bilaterales y el ritmo de los trabajos y de las relaciones no son del todo fáciles de recuperar”.







4 feb 2013

¿Cómo llegar a ser un gladiador?

Leyendo a mi amigo Fernando en su blog "El peregrino gris" se me ha ocurrido hacer esta entrada puesto que estoy estudiando el tema para mi trabajo de final de grado.  Gracias Fernando por inspirarme! ;)







No se si alguna vez te has preguntado que requisitos tendrías que haber cumplido en la antigua Roma para poder ser un gladiador y comenzar a hacerte famoso en ese mundo.  Muchos guías turísticos, cuando te muestran los anfiteatros, comparan, a pesar del anacronismo, el ser un gladiador famoso con el ser un futbolista famoso en la actualidad.  Yo cuando lo oigo siento un retortijón tremendo en el estómago, porque mientras unos se juegan un gol, los primeros se jugaban la vida.



Y es que para ser gladiador había que tener cierto "talento", por vocación o por obligación, pero sobre todo una suerte tremenda para poder sobrevivir a tu contrincante.

La ventaja de ser un gladiador en la antigua Roma es que te convertías en una inversión económica, desde el momento en que entrabas a formar parte de un ludus  mucha gente se preocupaba por ti, bueno, exactamente por ti no, más bien por el dinero que el gladiador iba a reportar al dueño del ludus.  Un gladiador era un desecho de la sociedad y en su mayoría, había excepciones, buscaban trabajo como luchador-matador por desesperación, muchos de ellos habían sido con anterioridad bandidos, atracadores o facinerosos y Roma no entendía de reinserción, así que ser gladiador podía ser una salida (a esa vida, o a la vida en general).



Una persona se convertía en gladiador por varias vías:

1. Por ser un criminal.- Sentenciado por los jueces, que curiosamente además, como élite de la sociedad, ellos mismos patrocinaban los espectáculos, así que en realidad se convertían en carne de cañón, o carnaza para el disfrute de los ciudadanos.  Si el juez que dictaba esta sentencia podía elegir entre damnantio ad bestias en las que el acusado se enfrentaba a las bestias y entonces terminaba descuartizado y devorado; o Damnantio ad gladium que consistía en morir por espada (gladius), es decir, luchando, aunque esto no tenía porque ser la salvación de su vida, porque a veces se ponía un plazo para que sirviese de divertimento pero en un plazo moriría igualmente; o también podía ser condenado a Damnatio ad ludos, es decir, a participar en los juegos, que sería el comienzo de la carrera de gladiador propiamente dicha.

2. Capturado durante la guerra.- Las campañas tenían como resultando la adquisición de prisioneros de guerra.  Se trataba de gente que ya sabía utilizar armas, muchos gladiadores reciben su nombre de prisioneros de guerra.  

3.  Esclavo.- Condenados en muchos casos por atacar a su propio amo o por ser desobediente o no aceptar órdenes.  Estos esclavos eran vendidos (bajo autorización judicial) al anfiteatro.

4.  Moroso.-  Una persona podía venderse a sí misma para poder subsanar deudas.

5.  Voluntario.-  La vida glamurosa del gladiador llamaba a voluntarios (auctorati).    Había de dos clases los quastus causa (por dinero) y los virtus causa (para demostrar sus habilidades), un ejemplo fue el emperador Cómodo.    En estos casos aparecían con la cabeza cubierta por un casco, luchando de extranjis, para que nadie supiese quien era, por la censura social.

6.  Por no ser ni tener nada de nada.- Muchos jóvenes salían del campo en busca de fortuna en Roma y desesperados terminaban apuntándose a los espectáculos, simplemente porque era una forma mejor de sobrevivir el mayor tiempo posible, mejor que viviendo en las calles como pordioseros.  En otros casos se trataba de soldados licenciados que no querían volver a reengancharse en el ejército después de haber sufrido una mili de 25 años.

7.  Por ser un "payaso".-  Ciertas personas como mujeres o enanos con ciertas habilidades podían ser una novedad en la arena y podían dar espectáculo.  Se convertían en primicias propias del marketing actual.



Los juegos daban riqueza, fama y redención personal a las personas adecuadas, a las que no lo eran  les daba la oportunidad de tener una muerte honorable.  Muchos gladiadores elegían esta carrera porque de todas formas iban a sufrir las mismas cosas en un futuro cercano.  A partir de que te convertías en gladiador ya nunca volverías a estar solo, un montón de gente se preocuparía por ti, por tu vida y sobre todo cuando estuvieses en la arena jugándote la vida.



MATYSZAK, P. "Gladiador".   Ed. Akal.